martes, 5 de noviembre de 2013

Capítulo 53

16 de Julio

23:19. Hoy no me siento nada de bien. Tengo mi corazón partido por la mitad. Me parece que nada podría volver a unirlo.
Es increíble lo que una mujer, en nombre del amor puede llegar a hacer y a olvidar también.
Me siento mal. Sucia. Usada. Humillada. Vejada. Me siento como una puta…
Son tantas las cosas que tengo que contar… pero no había tenido el valor de sentarme a escribir. He esperado que Arturo Mollins se fuera a acostar con su tazón de café. Apagué todas las luces y solo me ilumino con la luz de los postes del alumbrado público. He puesto un CD de toda la música que más me gusta.
Ahora suena Epilogue – Relief, de Apocalyptica. El tema me hace sentir peor, más triste aún. Si es que es posible sentir más tristeza y humillación. Es como si miles de puñales se enterraran en mi cuerpo… ¡Haij! Dios Santo… soy tan, tan estúpida… en algo ha tenido razón todo este tiempo Jeremy: soy una pendeja.
Resulta que el jueves finalmente, a regañadientes acepté la invitación a salir de Jeremy. Fuimos al mismo motel de siempre… durante la tarde me había estado diciendo lo que haríamos.
Una vez allí me comenzó a toquetear como es su costumbre. Me sacó la ropa y nos tiramos a la cama. Debo decir que lo pasamos mejor que la última vez. Yo me dejé llevar. No estuvo mal, para qué miento, mejoró bastante, aunque a cada rato me decía si había llegado al orgasmo… la última vez le dije que sí, porque estaba aburrida de que me hiciera la misma preguntita.
Cuando la acción llegó a su fin, yo me pegué a su cuerpo, no sé, esperando que me abrazara o alguna tontera más romántica. Lo único que saqué fue una quemazón en mi brazo con su estúpido cigarro encendido. Me dijo que no fuera bruta para hacer esas cosas… en realidad… si, soy muy, muy bruta y no me había dado cuenta de nada.
En ese momento se vino la peor parte, lo que no podré jamás en mi vida olvidar.
Se me ocurrió preguntarle si era verdad eso de que me quería.
- Si, claro – dijo lanzando una bocanada de humo – siempre te he querido… dar un buen revolcón… - y lanzó una risotada.
- Te lo pregunto en serio… qué tanto me quieres…
- Gómez… qué te pasa… te lo digo en serio… ¿acaso piensas que te amo?
- Pues… no sé…
- ¡Ja!... oye, ven que te tengo ganas todavía…
- Te tengo otra pregunta – me puse tensa. Algo no andaba bien.
- Ya rapidito… me cargan los interrogatorios post coito
- Qué fue eso que me dijiste el otro día, eso de que solo yo era tu aventurilla y que yo era la otra mujer… no entendí, pensé que teníamos algo serio entre nosotros…
- ¿Algo serio?... a ver, me parece Gómez, que te has estado pasando muchas películas conmigo. Yo ya tengo mi relación seria hace un buen rato. Tú eres la “otra” por así llamarlo. Me completas…
- ¿Qué te completo?… oye – dije riéndome, creí que me estaba tomando el pelo-, yo no quiero ser “amante” de ningún hombre…
- Pero lo eres…
- ¿Perdón? – dije sentándome en la cama y mirándolo fijamente.
- Qué… oye, no me mires así… si tú lo sabes….
- Que yo se qué, Jeremy… - el corazón me latía muy fuerte.
- Por favor, no seas estúpida… tu eres mi amante desde hace semanas… y bastante buena cuando no te da por andar preguntando tonterías…
- Yo… yo… no… tú, estás mal… no entiendo lo que me dices… tu me dijiste que estabas soltero, cuando te pregunté me dijiste que estabas soltero, yo te lo pregunté y eso me respondiste tu – chillé horrorizada.
- Si… y cuando me lo preguntaste, claro que lo estaba…
- No… Jeremy, no… - dije saltando de la cama y cubriéndome con la sábana.
- Por favor. No seas patética… ven acá, démonos otro polvo y listo…
- ¿Te casaste?… ¿es eso?... ¿cuán… do? - dije con un hilo de voz.
- Me casé el sábado pasado por el civil. Me caso pasado mañana por la iglesia… o sea, tu eres mi despedida de soltero… jajaja… ¡Y GRATIS! Jajaja… - a mí se me había desencajado la quijada de la sola impresión.
- Te costaba mucho decirme eso… me has… me has… - no me salían las palabras.
- ¡Buf!... ya… sorry… así mejor nos vamos. Si te pones a llorar agarró mis cosas y me voy… Gómez tienes un lindo trasero, y ese tatuaje que te hiciste es demasiado sexy, te lo he dicho siempre. No eres lo que busco para mi futuro. Si te hiciste ilusiones conmigo, de verdad que lo siento… amo a mi señora. Es una tremenda mujer, sin ofender te faltan años luz para estar a su nivel. En el sexo es una fiera ¡uf! Hace lo que le pido… pero cuando ella no está, tu llenas esos vacíos… pensaste que me separaría de ella ¿por ti? – dijo riendo.
- Es la misma con la que te fuiste a Argentina…
- Claro… qué crees, que andaría cambiando de Polola como cambio de amante… jajaja… No te aflijas, siempre te he dicho que te quiero. Ya, ven para acá, mira que estoy excitado de nuevo… pagué el cuarto por toda la noche…
Solo me lo quedé mirando… ahora encajaban todas la piezas en el rompecabezas… ahora todo cuadraba de las peores mil maravillas…
Tomé mi ropa, me vestí y salí del cuarto. Él me decía cosas, pero yo no lograba escuchar nada, porque tenía la cabeza hinchada. Antes de irme le dije que esperaba que fuera feliz con su señora, me respondió que no me comportara como una pendeja bruta. Cuando cerré la puerta, él se estaba levantando de la cama.
Me vine caminando lentamente hasta el departamento. El viento helado no me ayudó a despejarme. Mi mente daba vueltas. Todo daba vueltas. Me tropecé y caí al suelo. Rompí el pantalón en la rodilla y me rasmillé las manos.
Cuando llegué, Arturo Mollins estaba sentado en el sillón leyendo un libro. Me quedó mirando. Se puso de pie rápidamente y comenzó a hablar. No sé lo que decía… solo cuando me tomó por los hombros y me sacudió me di cuenta.
-          Gabriela, te estoy preguntando que si estás bien. Estás pálida… qué ha pasado, ¿te han asaltado? ¿quieres que llame a alguien de tu familia? ¿necesitas un médico?
-          No… - dije sin saber qué me estaba preguntando – no… yo… estoy bien… muy bien…
-          ¿Segura? ¿Quieres tomar algo caliente? No te veo bien…
-          No… - seguía sin entender nada.
-          Y tu ropa – me dijo Arturo Mollins -, Gabriela tu ropa… ¿segura que estás bien?, me estás preocupando mucho. – yo me había acercado a la mesa de la cocina por inercia. No podía sacarme de la cabeza la palabra “amante” - ¡Gabriela! – me gritó Arturo Mollins – dime qué mierda te está pasando…
-          No me pasa nada… - dije con un hilo de voz. “Amante” “puta” “zorra” “ramera” me repetía en la cabeza.
-          ¿Y qué le pasó a tu ropa?
-          ¿A mi ropa?
-          Mírate… tus pantalones están entierrados y rotos, los botones de tu abrigo están abrochados en escalera… ¿me quieres decir lo que pasó? – mi ropa, mi ropa interior. Necesitaba limpiarme. Mi cuerpo estaba sucio.
No sé, de pronto todo se me nubló. Me mareé y Arturo alcanzó a sostenerme. Él me repetía que le dijera qué era lo que me sucedía.
-          Suel… suéltame, suéltame. No me toques, no quiero que me toques… tú no me puedes tocar así… - recuerdo haberlo empujado. “Amante”, “puta”, “zorra”, me repetía en la cabeza.
Comencé a sacarme la ropa, sentía que me quemaba. Estaba inmunda. Yo estaba sucia. Me desesperaba tener todo eso puesto… me encerré al baño, me saqué todo y me metí desnuda bajo la ducha. Mientras caía el agua, me puse a pensar en lo que habíamos hecho esa noche y se me revolvió el estómago. No me pude aguantar y me puse a vomitar. Tenía asco… asco de mí… asco de todo… asco de mi propia estupidez…
Debí haber estado por mucho rato bajo el agua. Cuando salí tenía los dedos arrugados y me sentía desmayar. Quizás horas estuve encerrada allí… cuando salí del baño, Arturo Mollins seguía en el living con el rostro contraído por la preocupación. Miraba la puerta del baño. Yo salí solo cubierta con una toalla y con el pelo suelto. De hecho era una toalla que se le había quedado a él en el baño…
-             Es tarde… - me dijo con tranquilidad  – debes secarte el pelo sino, te volverás a resfriar… ¿quieres comer algo o tomarte una agua de hierbas?
-          ¿Crees que si me resfrío pueda morir?
-          Quizás… es posible… - dijo sonriéndome.
-          Bien. En ese caso me acostaré con la ventana abierta… por que ahora lo único que deseo… es morir… - me encarcelé en mi pieza y cerré la puerta justo cuando Arturo Mollins decía mi nombre e intentaba entrar a detenerme.
Me tiré a la cama. Todo el mundo seguía dado vueltas en mi cabeza.
Me quedé dormida con el olor de la toalla de Arturo Mollins metida en mi nariz… por suerte olía a él y no a Jeremy… olía al jabón de Arturo Mollins… olía solo a él… solo a él…


Bueno… aún no he muerto. A pesar que me tiré a la cama desnuda, cubierta con una toalla mojada y el pelo estilando.
Este día ha sido el más horrible de todos.
Anoche lo único que deseaba era morir. Arturo Mollins no me dice nada… solo me mira. Por lo menos ha respetado mi espacio. No he llorado. Pero me siento muy mal…
Hoy Jeremy se casará por la iglesia, el maldito bastardo. Y yo me presté para sus tonterías, para todas sus porquerías como una completa estúpida… por la iglesia, el maldito perro hipócrita. Ese debe haber sido el proyecto por el cual todo mundo lo felicitaba: su matrimonio por el civil… y yo no me di cuenta. Años de estudio, años de preparación, años de tomar cursos y talleres, años de cultivarme y un maldito hijo de puta me había hecho dos veces lo mismo. Dos veces me había destrozado la vida, dos veces… y yo caí como una tarada. Me usó y yo creí que era amor… que idiota.
¿Por qué Dios me castiga de esta forma? ¿Por qué tengo que pasar por estas cosas?... yo no creo ser una mala persona… no sé por qué estas cosas me pasan a mi. 
Ya es media noche y en mi CD suena un tema de Air Supply que me hace odiarme, por ser necia, tan bestia. Una completa cretina.
No quiero llorar. No quiero sentirme débil. No quiero que me la gane. No quiero dejarme vencer por la humillación. No quiero… no quiero caer, porque no tengo dónde caer… no tengo a nadie que valore mis sentimientos. Solo tengo un dolor muy profundo en mi corazón… 
Increíble… es tan poco lo que una pide como mujer. Amor sincero que se vea reflejado en respeto. Y es justamente lo que menos he tenido en mi vida…
Hay olor a café, aunque yo me preparé un jarrón de chocolate. Quizá no lavé bien el jarro. ¡Dios! Está sonando un tema que dice lo que espero de alguien. “Somebody”, de Depeche Mode. El tema me está matando. No puedo controlarlo… me siento destrozada. Dos veces caí con el mismo bastardo. Dos veces… es tan poco lo que deseo del amor… maldita sea… ¿Por qué a mí?… ¡¿por qué a mí?!… me niego a llorar… tengo un horrible nudo en mi garganta, pero no lloraré… solo requiero algo de tiempo para sanar las heridas que yo misma me he provocado. Luego me levantaré y seguiré mi camino. Yo sé que lo haré… solo necesito… un poco de tiempo, para ordenar mi vida…
Son los últimos compases de la canción… mm… y el olor a café es intenso… siento que me miran pero eso no puede ser, Arturo Mollins se encerró hace horas en su habitación. Me ha dejado para estar sola un rato. Debo agradecerle. Ha sido tremendamente respetuoso conmigo. Aunque ahora me habría gustado tenerlo cerca, para que pusiera mi cabeza en su pecho y me acariciara el cabello. Para que me dijera que todo va a estar bien de nuevo, que él me comprará los helados que desee, que me cuidará, que él se hará cargo de mis problemas mientras sano mi corazón y todo vuelve a su lugar… maldita sea… se me calló un lagrimón al jarro… y el olor a café aún no se va… si… me gustaría tener a Arturo Mollins cerca en este momento, para cerrar los ojos, detener el tiempo y protegerme entre sus fuertes brazos… para perderme para siempre en los latidos de su corazón y poder así volver al mío a la vida… 

¡Oh! Jeremy… ¿por qué me has hecho esto a mí de nuevo?... ¿Por qué?...

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Siguiente entrega: MIÉRCOLES. 
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8 comentarios:

  1. Hay mi Yiyi, bien dicen que uno puede hasta perecer por falta de conocimiento..... Tranquila no te mates la cabeza. La inicencia no es buena compañera de amores, querida, dolerá y dolerá mucho..... pero pasará.
    Ahora si quieres lo Cogemos al hp de Jeremy y le cortamos sus joyitas, para que te recuerde pa´toda la vida!?!?!?

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  2. ooohhh!!! :´( q pena mas grande yiyi!!pero esto es un mal necesario!! maldito jeremy!! lo odio...
    me encanta tu historia!! como e llegado a esperarla todas las mañanas.

    saludos a meche.

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  3. Yiyi no quiero decir te lo dije, pero TE LO DIJE!!!
    Ay linda, me duele tu tristeza :(
    Ahora la buena noticia es que los brazos fuertes y el latido del corazon de cierto señor estara ahi para ayudarle a sanar su corazoncito.
    Jeremy que mejor se quede alla donde va a ir de luna de miel porque donde yo me lo encuentre... ya tengo listo mi machete!!!!
    Aunque por otro lado y pensandolo mejor, le va a arder cuando vea a Yiyi en mejor posicion que el, ay te juro que pagaria por leer eso...

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  4. uff...que dolor!! Te felicito por la forma de escribir, es increíble como logras transmitir los sentimientos, cuando lo leía no pude evitar lagrimear.
    Espero que mañana comience a consolarla Arturo jeje..

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  5. Que mal,
    ojala se de cuenta luego q arturo mollins le tiene ganas..... yes!!!!!

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  6. Mnm si y ahora viene lo mejor ... el consuelo de arturo .. quee lindo que alguien te valore como mujer y seas para esa persona lo que mas ama . .llora y llora que tenes que descargar . Que lo mejor se viene ahora

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  7. pobre gabriela como semejante pendejo se vino a encontrar ojala que la consuele Arturo....

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  8. Bea, Maylee, Susana, Marce, Johanna, Celina y Sandra. Gracias por sus comentarios.
    Espero el capítulo les haya gustado... Agradezco también el espíritu justiciero de algunas, siempre tan oportuno y entretenido de imaginar.
    Como habrán leído... ahora me preparo para intentar re-construirme...
    Besos para todas :-)

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